Toda orientación presupone desorientación. Sólo quienes han experimentado el extravío pueden librarse de él. Pero estos juegos de orientación son a su vez juegos de desorientación. En ellos reside su fascinación y su riesgo. El laberinto esta hecho para que el que entre se pierda y se confunda. Pero el laberinto constituye a su vez, un desafío para el visitante a fin de que reconstruya el plano y disipe su poder. Si lo consigue, habra destruido el laberinto; no existe laberinto para quien lo ha atravesado.

R-Grillet

8 comments:

Carpe diem said...

Sin embargo, yo tiendo a extraviarme con una frecuencia alarmante. Y no me refiero a cuestiones de orientación básica, ésas las domino bastante bien. ¿Qué pasa cuando uno se pierde en uno? ¿Qué pasa cuando uno se pierde en los ojos del otr@?

Mariposa}:{Mística said...

a mi los laberintos me sugieren aburrimiento, tanto por pasarlo rápido como por perderme, de seguro no me insentiva una adrenalina...

Me cuesta mucho perderme...

Anonymous said...

Qué hermoso que me hayas dicho el texto de origen. Conocer la fuente parece acercarnos más al centro del laberinto. Gracias por el hilo.

Laura A. said...

y si una no se pierde como se encuentra?
saludos ;)

Gatone said...

Creo q es sumamente dificil el orientarse de la manera correcta en esta vida, por lo menos eso me pasa a mi. Muy bueno el blog. saludos

Anonymous said...

Me parece imprescindible perderse en un laberinto alguna vez en la vida, ejercita nuestros sentido de supervivencia y nos obliga a encontrar una salida desafiando nuestras fuerzas e intelecto.

Anonymous said...

la dialéctica de los opuestos
es el péndulo
los giros de la medusa.

Cuni said...

Es extraño, porque cuando uno se da cuenta de que está perdido y deja de buscar y asume que ya no tiene el control, automáticamente aparece la calma y la seguridad.
Muy lindo texto.